En
un principio podemos pensar que el cuidado de las uñas tiene meramente una función estética, pero lo cierto es que
a través de las uñas se pueden transmitir microorganismos patógenos, sustancias
tóxicas, alérgenos… por lo que su cuidado, su higiene y su limpieza son fundamentales también para muchos aspectos de la salud de nuestro
organismo.
Debemos
tener especial cuidado en que la uña no
pierda ni su dureza ni su flexibilidad (consecuencia del grado de
hidratación), ya que conduce a la fragilidad y a la rotura de la misma. Ambas
propiedades, equilibradas, ayudan a mantener la estructura de la uña intacta.
A
continuación os voy a detallar algunos de los correctos cuidados estéticos que conozco para que nuestras uñas
luzcan sanas y bonitas: