¡Llega el día de conocer mi producto favorito del mes! Normalmente
os enseño algún producto de maquillaje nuevo en mi tocador que he estado
probando y que me ha encantado hasta tal punto de parecer en mi “I love you” del blog. Pero este mes he
estado enferma y apenas me he maquillado ni he comprado (como veréis en el mini
haul de enero), así que en honor a la verdad no os puedo recomendar nada de
maquillaje como tal. Pero como ducharse, una se ducha incluso estando con gripe…
he decidido que mis productos favoritos de enero sean un combo que me tiene
enamorada desde la primera vez que los usé. Os hablo del inconfundible “Snow Fairy” de Lush en su versión gel
y acondicionador corporal.
El gel de ducha Snow Fairy es un viejo conocido, ya con el que repito
año tras año. Su olor a chuchería, para alguien tan golosa como yo, hace que
cada Navidad tenga la necesidad de hacerme con un bote. Y si no lo habéis
probado aún me temo que hasta las próximas navidades no podréis hacerlo porque
esta línea de productos de Lush es de edición limitada. Si no me equivoco sólo
está disponible de octubre a enero, así que apuntad en vuestras agendas la
fecha para ir a una tienda Lush o hacer un pedido online el próximo año.
El gel, como la gran mayoría,
limpia bien y hace su función pero, sin duda, destaca por su increíble aroma y
su color rosita. Es un gustazo ducharse con él y, aunque tengo adoración por
las espumas de Rituals, éste es mi olor favorito para ducharme sin dudarlo.
Pero en especial hoy os quiero
hablar del acondicionador corporal Snow Fairy,
que han creado este año en Lush como novedad navideña para acompañar al resto
de productos de esta línea. Se trata de un producto que nos aplicamos dentro de
la ducha, con la piel húmeda, y que luego tenemos que aclarar. Nos aporta
suavidad e hidratación sin necesidad que tener que embadurnarnos después de
crema al salir de la ducha. Y eso es precisamente lo que me gusta de este tipo
de productos, no sólo de este acondicionador, si no de cualquier producto (como
el Oil&Go de Natural Honey) que me evita ese momento de después. Yo soy muy
friolera y el hecho de tener que estar aplicando crema y esperando a que se
absorba antes de vestirme hace que no disfrute ese momento y que, en muchas
ocasiones, prescinda de ese paso. Sin embargo, con este concepto de productos hidratantes
dentro de la ducha se acabó el problema.
Este acondicionador Snow Fairy
como veis es también rosa, como el gel, y desprende el mismo aroma, con lo cual
me parece un combo perfecto. Es cierto que el olor no nos perdura luego en la
piel, pero el momento de la ducha lo hace muy agradable y con eso me basta. El
de Lush se utiliza de manera diferente al aceite Oil&Go que os comentaba
porque sí es necesario que lo aclaremos dentro de la ducha y el de Natural
Honey no. Primero nos lavamos con el gel y después ya usaríamos este producto.
Se extiende fácilmente aunque sea una textura algo más densa que un aceite y
después nos deja una sensación, a priori, algo “pegajosa” en la piel, pero
prácticamente al momento desaparece y podemos vestirnos sin problemas. El
cuerpo nos queda suave e hidratado tras su uso. ¡Desde luego que tenía que aparecer entre mis favoritos porque me encanta la idea!
Son productos algo más caros que
los que podemos encontrar en cualquier supermercado pero merece la pena darse
un caprichillo navideño. Os lo aseguro.
Y aquí os dejo el link al vídeo
de youtube donde podréis ver que estos productos ya han llegado,
lamentablemente, a su fin. ¡Pero me esperan las próximas navidades!
Os
recuerdo que podéis seguirme por Youtube (SwatchesEneri), FB ("Los
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resultar interesante.
